poesía

Sin mirar

Volver a las poesías desacertadas

 

 

Bonitos ojos grises, como un día de invierno

nublado al atardecer, entristecidos por

una incesante lluvia de nostalgia y dolor,

sigues sin querer observar ni ver los detalles,

que, a tu paso se muestran de sabores llenos

por el esplendor de toda clase de colores.

 

Perdida, en la inmensa soledad de tu mente,

encasillado te has, tal si viejo trasto fueses

y del cual su creador desprenderse no quiso,

quizá por incompleto, quizá por compasión

de un viejo reflejo, de un ideal que perdura

en su mente mas no sobrevivió a toda moda.

 

Mientras te torturas, otros superan tu espacio,

atraídos por la belleza de imperfección

de tu ser, más allá de tu mirar, tu atención

intentan rasgar, golpeando, como las gotas

de esa lluvia que te acompaña, en tu soledad

sombría, sobre el tejado de tu habitación.

 

¡Qué más da!, aquí sigues negando la evidencia,

No eres objeto mas aguardas, con desacierto,

a ser trofeo de una noche para cualquiera,

alguien hablará sin saber más de ti, y no ves,

cómo si no hubiera para ti otro mayor reto

que ser un bonito estandarte, nada especial …

 

 

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