Hipérbaton del todo
Volver a las poesías desacertadas
Feliz para ser necesitas
todo lo que delante tienes de ti.
De reyes la sangre que, saberlo sin,
corre por tus estrechas arterias.
Despavorido que, de la soga,
librado como un galgo se ha,
trasladarte que puedan, puertas,
a nueva y expectante moral.
No cierra ni abre, ni llave alguna es,
predican las cartas que ya
para torres unir que, cruzar a
no utilizar a tu antojo sabes.
Atreves al fiel enroque no te,
formó del juego parte nunca,
fue de tu mente parte nunca,
salvación ni estilo tampoco es.
Cayendo uno a uno los naipes van,
dejando al descubierto tu temer,
es del contraataque hora ya pues
valiente, ni el más, lo espera.
Fuerte tu escudo bastante no es,
oyendo tu joven mente y audaz,
del desastre a los cometas ya está,
para recibir impacto a dolor sin temer.
Que frenen de batalla miradas tuyas,
reprimidas en negativas quedan.
Avanzar tus ganas te impiden,
cerrada terquedad, perdida
por dando en la nebulosa curva.
Mantiene te y aceptando,
de una guerra,
la derrota que, ni comenzar,
supiste ya.